La cocina marroquí es fascinante… tajines, cuscús, pastillas, tés a la menta… Una gastronomía exótica capaz de transportarte al corazón de la medina, entre cuyas estrechas callejuelas se cuelan exóticos sonidos pero, sobre todo, aromas, muchos aromas. Los de las especias, los de los pétalos de rosas y otras flores, los de los encurtidos, los de la menta…
Las recetas típicas del tayín, el cuscús y la pastela se nutren de sabores que combinan especias como la canela (en marroquí, cini), la cúrcuma (karkoum), el comino (kamoun), la pimienta (bsar), el pimentón (felfa hlouwa), semillas de sésamo (jinjelan) y anís (nafaa) y el azafrán (zaafrane beldi). No obstante, son dos mezclas elaboradas las que gozan de una mayor proyección internacional en la oferta de comidas originarias de Marruecos.
05/01/2018