Apreciada como una de las gastronomías más singulares del norte de África, la cocina de Marruecos es generosa en sabores, aromas y colores. Hija de tradiciones milenarias que hunden sus raíces en las costumbres de los pueblos moros, bereberes, mediterráneos, orientales y africanos, la gastronomía tradicional marroquí aprovecha muchos recursos propios de un país en el que las combinaciones de dulce y salado son todo un rasgo de identidad. Al popular té a la menta, que suele ambientar cualquier almuerzo o tertulia cotidiana, se une una amplia gama de productos naturales como las aceitunas de Meknés y las frutas cítricas de la imperial ciudad de Fez.
05/01/2018